
Seguro que Murakami, es bastante más obsesivo que yo, y con la enorme ventaja de que no le afectan las lesiones.
Con unos maximalismos que desconciertan, como su posible epitafio "Escritor y corredor (nunca anduvo en una maraton)".
Está bien para vivenciar a otros que hacen cosas parecidas a lo que tú haces: ¿Cómo lo vivencian? ¿que duendes les merodean?.
Recomendable. No es ninguna obra de arte, ni va más allá de lo superficial. Quizás la idea de bibliografía, de contar una experiencia personal le ha predispuesto a mantenerse distanciado de lo que escribia. Lástima hubiérmos leido otra novela, sin duda, más rica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario